Las empresas son organismos vivos y como tal, las dinámicas que se crean las influyen por encima de los individuos que las constituyen. También están expuestas a traumas, a momentos de crisis y de sufrimiento.
Podemos decir que cada empresa es una entidad única, tiene su cultura, sus valores, sus creencias y su memoria, que ha construido a lo largo de su historia. Estas memorias le dan fuerza y recursos si están alineados. Pero pueden representar también obstáculos si no lo están, ya que estas memorias son el inconsciente de la empresa.
El trabajo de constelaciones empresariales des de el enfoque o mirada sistémica, permiten diagnosticar los traumas y otros temas ocultos o conflictos: sacan a la luz estos obstáculos para poder transformarlos y enderezar el camino al éxito. También son un apoyo a la creatividad y sobre todo una oportunidad de actuación adecuada en tiempos de crisis.
Pero qué tiene que ver todo esto, con las lealtades familiares y la toma de decisiones?
Pues más de lo que crees!
Como te decía más arriba, la importancia de esa memoria empresarial (valores, creencias, cultura, etc..) se encuentra en que esté alineada, que esté en orden, precisamente para tomar desde ahí su fuerza y recursos.
Y que esté alineada significa que esos obstáculos, problemas o traumas de la propia empresa estén resueltos, y que los nuestros propios, también! Hay que hacer un ejercicio de ser conscientes de cuál es nuestro equipaje, de nuestros temas pendientes y de deshacer nudos energéticos, emocionales, mentales que nos puedan privar de avanzar más libremente en nuestra vida. Nuestros tema personales nos influyen en nuestra forma de pensar, de sentir, de actuar, de comportarnos, y por tanto de posicionarnos hacia una dirección u otra a la hora de tomar decisiones. Éstas, a veces conscientemente, y otras, inconscientemente. Las que tomamos de forma inconsciente, son las que tienen más que ver con nuestras lealtades familiares. Eso es, con lo que aprendimos y vivimos en nuestro seno familiar, y con el sistema familiar al que pertenecemos.
Para poder explicarte en qué consiste todo esto de las lealtades familiares, tengo que hablarte de lo que son los campos mórficos y qué tienen que ver con las lealtades familiares de nuestro sistema familiar, con el amor ciego y con nuestro niño interior.
La resonancia mórfica, igual que los campos eléctricos, son espacios de fuerza (energía) que rodean a un elemento. También están relacionados con la forma en que se transfiere el conocimiento. Los campos morfogenéticos son campos de hábito, que permiten la transmisión de información entre organismos de una misma especie sin mediar una comunicación directa, ni formas de contacto convencionales.
Esta teoría está emparentada con el concepto del Inconsciente Colectivo del psicoanalista Carl Jung. El inconsciente colectivo es una estructura psíquica universal presente en los procesos de pensamiento de toda persona. Está compuesta por patrones heredados («arquetipos»), que conectan a cada persona con el resto de la humanidad. Según Jung en todo aquello de cada uno de nosotros que piensa, dice, crea, imagina y realiza en el presente, ejercerá una influencia sobre las generaciones futuras.
El proceso de resonancia mórfica es similar al del inconsciente colectivo, ya que funciona como una memoria acumulativa que deriva de la experiencia histórica de cada especie. Cualquier miembro de una especie se encuentra influenciado e influenciando esa memoria. Por tanto, estos conceptos desde el enfoque sistémico de las constelaciones nos viene a decir que, todo aquello que pasó en 7 generaciones atrás, es información heredada o guardada en nuestro campo mórfico (eso es, nuestro sistema o clan familiar al que pertenecemos).
De ahí que podamos afirmar que la lealtad familiar es un sentimiento de solidaridad y compromiso, que unifica las necesidades y expectativas de la familia, así como los pensamientos, sentimientos y motivaciones de cada miembro (Enric Corbera). Estas lealtades o «contratos familiares», están alimentados por el sistema de creencias que proporciona el sistema familiar, eso es:
- una identidad
- el sentimiento de pertenencia
- y equilibrio en las relaciones
Las lealtades son inconscientes y se sostienen gracias al amor ciego que nos vinculan al clan. Este amor ciego nace de un sentimiento inconsciente de deuda hacia los que vinieron antes, por habernos dado la vida. También tenemos una necesidad primaria de pertenencia y una necesidad biológica de supervivencia. Dicha necesidad de pertenencia es tan poderosa, que tomamos asuntos que un antepasado no pudo resolver o concluir en su vida. Lo incorporamos a nuestro destino, nos hacemos cargo de sus emociones, y sentimientos que no nos pertenecen, por esa lealtad, sentimiento de deuda, aceptación y pertenencia.
Estas lealtades ciegas e inconscientes, se reflejan y nos influyen en todos los aspectos de nuestra vida, como en nuestro liderazgo, la toma de decisiones en nuestro día a día, en las relaciones personales y laborales que no fluyen, enfermedades, accidentes, en las relaciones de pareja, en nuestro nivel de autoestima, en nuestro autoconcepto de merecimiento, o en la relación que tenemos con el dinero, etc…
Si no estamos en buena sintonía o no existe armonía, orden y paz con respecto a los valores de la empresa, con los fundadores o bien con los miembros que forman parte de ella, será una lucha constante el estar liderando, una constante fuente de conflicto, porque no se estará priorizando el beneficio de todo el sistema empresarial, sino el personal.
Existe la posibilidad de cambiar todas estas lealtades inconscientes que nos influyen, tomando consciencia de la FORMA EN QUE AMAMOS a nuestros padres y familiares.
¿Cómo?
- Reconociendo el tipo de relación que tenemos con nuestros padres y familiares.
- Transformando ese amor ciego en amor adulto.
- Respetando sus destinos y honrándolos.
- Cortando ese sufrimiento y dolor.
- Y dándoles un lugar en nuestro corazón,
todo ello, para que podamos hacernos responsables de nuestra propia vida y destino.
¿Sientes que a veces, actúas o tomas decisiones sin saber muy bien el motivo o el porqué las has tomado?
O incluso ¿tienes la sensación que tomas decisiones para que los demás no se enfaden, te acepten y te vean como una persona complaciente ya que eso es lo que se espera de ti y es lo que debes/tienes que hacer?
Espero que esta información te sea de utilidad y le puedas sacar provecho. Si sabes de alguien que le pueda servir compártelo! Y sin duda, si tienes cualquier pregunta o duda, rellena el formulario de contacto o bien escríbeme a hola@noemibatlle.com.
